Radiaciones No Ionizantes en el Ambiente Laboral
Contenido:
- Radiación en el Ambiente Laboral
- ¿Qué es la radiación?
- Fuentes de Radiación No Ionizante
- Efectos a la salud
- Normatividad
- Controles
Radiaciones en el Ambiente Laboral
A pesar de la mala fama que tiene la radiación, este tipo de energía forma parte intrínseca de nuestra vida cotidiana. Si tienes un microondas en tu casa, si escuchas el radio en el carro o si te conectas al WiFi para trabajar, estás aprovechando algunos de los muchos beneficios que nos ofrecen las radiaciones electromagnética.
Hoy es muy difícil evitar exponernos a esta forma de energía. La mayoría de la radiación electromagnética a la que nos enfrentamos diariamente no es un gran peligro para nuestra salud o vida debido la dosis tan baja que recibimos. Sin embargo, cuando nuestra dosis diaria sube —por ejemplo, por la naturaleza de nuestro trabajo— el riesgo que presenta a nuestra salud incrementa y se vuelve necesario adoptar medidas de control para protegernos de alguna alteración a nuestra salud.
Actualmente existen dos normas oficiales mexicanas referentes a la exposición laboral a radiaciones: la NOM-012-STPS-2012 y la NOM-013-STPS-1993. ¿Cómo saber cuál de estas normas aplican a tu centro de trabajo? Depende de las fuentes de radiación que se utilicen en sus procesos productivos.
Lo que es importante recordar es que la radiación electromagnética es más ubicua de lo que inicialmente parece, y lo más probable es que todos los centros de trabajo cuenten con por lo menos una fuente de radiación no-ionizante.
¿Qué es la radiación?
La radiación es la emisión de energía de cualquier fuente. El calor que emiten nuestros cuerpos es un ejemplo muy simple del fenómeno de la radiación.
La radiación electromagnética es energía que se desplaza en el espacio en forma de ondas, como la luz del sol o partículas. Estas ondas, al entrar en contacto con materia, excitan a los átomos que la componen y, dependiendo de su potencia, pueden llegar a generar calor o hasta alterar la configuración atómica de la sustancia.
Como la radiación es energía, su potencia es variable y medible. La cantidad de energía que caracteriza a la radiación se puede definir con base en su longitud de onda.
La radiación con longitudes de onda muy grandes lleva poca energía. La radiación con longitudes de onda muy pequeñas lleva mucha energía.
Entre más pequeña sea la distancia entre una cresta de onda y otra, más energía lleva consigo. Y sería natural pensar que entre más energía tenga una onda, mejor, pero como te podrá decir cualquier persona que se ha quedado dormida en la playa, la dosis define el peligro.
Foto Getty Images
A continuación, compartimos un video desarrollado por la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA por sus siglas en inglés) para describir que es la radiación y para qué la usamos:
El Espectro Electromagnético
El conjunto de todas las diferentes longitudes de onda se llama espectro electromagnético, el cual podemos dividir en diferentes secciones que nos ayudan a agrupar radiaciones con efectos y funciones similares.
Infografía: Adriana Vargas/OIEA
De un lado del espectro encontramos las ondas de mayor longitud y menor energía: radiofrecuencias, microondas y radiación infrarroja. Como son radiaciones de baja energía, generalmente se consideran de bajo peligro, siempre y cuando nos mantengamos debajo de los límites regulatorios. Este tipo de radiaciones no las podemos identificar a simple vista. Solo podemos observar sus efectos cuando las encontramos en dosis suficientes para provocar un incremento de temperatura o generación de calor.
Del otro lado del espectro electromagnético encontramos las ondas de menor longitud y mayor energía: rayos X, radiación gamma y radiación nuclear, cuya energía es tan grande que puede llegar a provocar daños a nivel celular y hasta mutagénicos en las personas expuestas.
Radiación No Ionizante VS Ionizante
Como hemos visto, la radiación electromagnética puede variar en energía y en longitud de onda. Estas dos características sirven para dividir el espectro electromagnético en 2 categorías de radiaciones: la radiación no ionizante y la radiación ionizante.
La gran diferencia entre estos dos tipos de radiaciones se puede ver más claramente en los efectos que producen en la materia con la cual interactúan. La radiación ionizante incluye los tipos de radiación electromagnética con mayor energía y menor longitud de onda, como es la radiación gamma y los rayos X.
Estos dos tipos de radiación llevan suficiente energía como para desprender electrones de los átomos de las sustancias con las que entran en contacto, provocando su ionización. Esto significa que puede causar daño irreversible a nuestras células y tejidos o hasta puede causar mutaciones en nuestro ADN que eventualmente pueden manifestarse en un cáncer.
La radiación no-ionizante tiene menos energía y, por lo general, en dosis controladas, no presenta gran peligro a la salud de las personas que están expuestas a ella. Sin embargo, la radiación no-ionizante lleva suficiente energía para excitar a los átomos de las substancias con las que interactúa, lo cual puede producir calor o inducir corrientes eléctricas. Las exposiciones descontroladas y elevadas a radiaciones no-ionizantes pueden provocar quemaduras u otros daños a tejidos expuestos (como los ojos o la piel) por calor.
Fuentes de Radiación Electromagnética
Radiofrecuencias y Microondas
Las radiofrecuencias y microondas son los tipos de radiación electromagnética con longitudes de onda más grandes y con la menor cantidad de energía. Fuentes comunes de estos tipos de radiación incluyen equipos como:
- Transmisores de radio y televisión;
- Señales transmitidas por celulares, torres celulares, teléfonos satélites;
- Señales de WiFi y Bluetooth;
- Radares;
- Tablets, smart-watches y otros dispositivos wireless;
- Equipos médicos (especialmente equipos de IRM / TRM)
- Hornos de microondas;
- Escáneres de ondas milimétricas.
Algunos puestos de trabajo pueden tener una exposición significativa a radiofrecuencias y/o microondas, por ejemplo:
- Los trabajadores de las industrias de radiodifusión, transporte y comunicaciones;
- Personas que dan mantenimiento a torres de antena que transmiten señales de comunicación;
- Personas que usan o mantienen equipos de radar;
- Algunos trabajadores de la salud (particularmente aquellos que trabajan cerca de equipos de resonancia magnética);
- Personas que trabajan con equipos que usan radiaciones de radiofrecuencia para calentar materiales, como son los selladores de plástico, ciertos equipos de soldadura y calentadores de inducción.
Infrarrojo
El siguiente grupo de radiaciones es la radiación infrarroja (IR), que tiene longitudes de onda menores que las microondas y, por ende, mayor energía. Casi todo el calor irradiado por cuerpos térmicos es radiación infrarroja, la cual no podemos detectar a simple vista, pero usualmente podemos sentir el calor que genera. Alrededor de 40% de la radiación solar es radiación infrarroja.
Estas características hacen que este tipo de radiación sea particularmente útil, especialmente en procesos industriales que requieren calentamiento como, por ejemplo:
- Fundición de metales,
- Curado de revestimientos,
- Formación de plásticos,
- Recocidos,
- Soldadura,
- Secado y esmaltado de pinturas y barnices,
- Entre otros.
Espectro Visible
El espectro visible incluye toda la radiación que podemos percibir con nuestros ojos. Este tipo de radiación tiene longitudes de onda menores que la radiación infrarroja pero mayores a la radiación ultravioleta. Todos estamos expuestos a este tipo de radiación en nuestra vida cotidiana a todas horas.
¿Por qué es importante imponer límites de exposición para la luz visible? Aunque no nos escapamos de la exposición al espectro electromagnético, es importante no exceder ciertas dosis para prevenir deslumbramientos y otros daños oculares que pueden causar un deterioro de la vista.
Ultravioleta
La radiación ultravioleta se encuentra en el umbral de las radiaciones ionizantes y las no-ionizantes. La mayoría de la radiación ultravioleta no cuenta con suficiente energía para ionizar la materia con la que interactúa, pero sí tiene una capacidad de penetración muy alta que puede ser dañina para la salud. Por estas razones, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC por sus siglas en inglés) clasifica la radiación UV como cancerígena.
En el ámbito productivo, las fuentes más comunes que generan radiación UV son:
- Hornos eléctricos;
- Soldadura;
- Lámparas de mercurio;
- Lámparas germicidas;
- La radiación solar (una fuente importante pero comúnmente olvidada).
Las radiaciones ultravioletas no son visibles, pero, como normalmente son acompañadas por ondas visibles violetas, se puede asumir que en donde ellas se observan pueden existir radiaciones del rango ultravioleta.
Rayos X y Radiación Gamma
Los rayos X y la radiación gamma forman parte de la categoría de radiaciones ionizantes por los niveles altos de energía que tienen y por su alta capacidad de penetración. Estos tipos de radiación son los más peligrosos porque son capaces de interactuar con la materia a nivel atómico que puede provocar daños a los tejidos, células, o hasta a nuestro material genético.
La radiación ionizante se utiliza principalmente en el sector salud para realizar exámenes diagnósticos o como tratamiento contra el cáncer. Algunos son:
- Rayos X;
- Tomografías CT o CAT;
- Tomografías PET;
- Instrumentos de fluoroscopia;
- Procedimientos de medicina nuclear (radioterapias).
Otros usos de radiación ionizante en el ámbito productivo incluyen:
- Microscopía electrónica;
- Inspección radiográfica;
- Cristalografía;
- Disipación de electricidad estática;
- Equipos auto-luminiscentes;
- Esterilización;
- Medidores de espesor;
- Producción energética.
Efectos a la Salud
Radiación No-Ionizante
La radiación no-ionizante presenta muy bajos riesgos a la salud del personal expuesto por los bajos niveles de energía. El efecto más prevalente con respecto a estas radiaciones de baja energía es el calentamiento del tejido expuesto.
El cuerpo humano tiene la capacidad de aguantar ligeros cambios de temperatura interna, sin embargo, el riesgo de daño a la salud incrementa cuando se rebasa cierto umbral (38°C). Temperaturas internas arriba de este umbral aumentan el riesgo de experimentar estrés térmico, el cual puede provocar:
- Agotamiento por calor, cuyos signos pueden ser debilidad, sudoración, náuseas y palidez;
- Sarpullido, que puede presentarse con irritación y picazón;
- Calambres, que pueden ocurrir durante la jornada laboral o después de ésta;
- Desmayo (síncope por calor), que puede estar acompañado de piel sudorosa;
- Golpe de calor, cuyos síntomas pueden ser delirio, fatiga, temperatura corporal mayor a 41°C, piel seca, azulada o rojiza.
Exposiciones agudas a radiaciones no-ionizantes pueden causar daños al tejido expuesto como quemaduras cutáneas, ampollas, enrojecimiento de la piel (eritema) e inflamación de la córnea (fotoqueratitis). Exposiciones directamente a los ojos pueden dañar la córnea, el iris o la retina y a largo plazo pueden provocar cataratas.
Radiación Ultravioleta
Como la radiación UV se encuentra en el umbral entre las radiaciones no-ionizantes y las radiaciones ionizantes, este tipo de energía comparte algunas características de ambos grupos.
Por el nivel de energía que tiene la radiación UV, además de los efectos a la salud derivados de la exposición a radiaciones no-ionizantes añadimos algunos otros. Por ejemplo, la radiación UV es fuertemente absorbida por las proteínas y DNA de los tejidos expuestos, lo cual puede causar:
- Envejecimiento temprano de la piel
- Desarrollo de tumores no cancerosos en el ojo (conocidos como pterigión),
- Inmunosupresión.
- Cáncer.
Sobre el último punto, según la Sociedad Americana de Cáncer, “la mayoría de los cánceres de piel son el resultado de la exposición a los rayos UV de la luz solar”. Los dos tipos más comunes de cáncer de piel (carcinoma de células basales y de células escamosas) tienden a desarrollarse con más frecuencia en las partes del cuerpo comúnmente expuestas a la luz solar como el cuello, la cabeza y los brazos.
Radiación Ionizante
La radiación ionizante (los rayos X, la radiación gamma, y la radiación nuclear) es la más peligrosa por los altos niveles de energía que tiene y su alta capacidad de penetración. Estos tipos de radiación tienen la habilidad de interactuar a nivel atómico con el ADN en nuestras células, lo cual puede causar mutaciones en nuestro material genético o puede dañar los tejidos y órganos con los que entra en contacto.
A niveles bajos y controlados de radiación, las células dañadas pueden repararse sin causar mayor daño. Cuando los niveles son más elevados, las células dañadas no tienen la capacidad de repararse correctamente, lo cual puede causar el desarrollo de tumores y cáncer. A niveles aún más elevados, la exposición aguda a radiación ionizante puede provocar daños a nivel celular tan profundos que pueden causar la falla de órganos y hasta la muerte.
Normatividad
Actualmente existen dos normas oficiales mexicanas referentes a la exposición laboral a radiaciones: la NOM-012-STPS y la NOM-013-STPS. Estas normas definen las responsabilidades patronales para los centros de trabajo en los que el personal puede estar expuesto a radiaciones y los límites de exposición que se deben vigilar para prevenir la alteración de la salud del personal ocupacionalmente expuesto. El campo de aplicación de estas normas depende de la fuente de radiación presente en el centro de trabajo.
Los centros de trabajo que tengan fuentes de radiación ionizante (como rayos X, radiación gamma, o radiación nuclear) caen dentro del ámbito de la NOM-012-STPS, al igual que el Reglamento General de Seguridad Radiológica. Los centros de trabajo que cuenten con fuentes de radiación no-ionizante deben procurar cumplir con los límites máximos permitidos de exposición que define la NOM-013-STPS.
Tipo | Región | Banda | Longitud de Onda | Frecuencia | Límites Aplicables |
---|---|---|---|---|---|
Radiación No-Ionizante | Sub-radio frecuencias | Ultra baja frecuencia | > 1,000 km | < 300 Hz | Ninguno (TLV disponible) |
1,000 km – 10 km | 300 Hz – 30 kHz | Radio y Microondas (NOM-013-STPSTabla I) | |||
Radio Frecuencias | 10 km – 1 m | 30 kHz – 300 MHz | |||
Microondas | 1 m – 1 mm | 300 MHz – 300 GHz | |||
Infrarrojo | IR – C | 1 mm – 3 um | Ninguno | ||
IR – B | 3 um – 1.4 um | Radiación Infrarroja (NOM-013-STPS Tabla III) | |||
IR – A | 1.4 um – 700 nm | ||||
Espectro Visible | 750 nm – 400 nm | Radiación Visible (NOM-013-STPS Tabla IV) | |||
Ultravioleta (UV) | UV – A | 400 um – 315 nm | Radiación Ultravioleta (NOM-013-STPS Tabla V) | ||
UV – B | 315 nm – 280 nm | ||||
UV – C | 280 nm – 200 nm | ||||
200 nm – 100 nm | Ninguno | ||||
Radiación Ionizante | Rayos X | 100 nm – 0.01 nm | Radiación Ionizante (NOM-012-STPS) | ||
Rayos Gamma | < 0.01 nm | > 30 EHz |
Medidas de Control: Radiaciones No Ionizantes
Para controlar la exposición a radiaciones no-ionizantes se pueden seguir una serie de recomendaciones:
- Aislar las fuentes generadoras de radiaciones;
- Construir barreras físicas adecuadas para minimizar la propagación de la radiación;
- Alejar las fuentes generadoras de radiaciones lo más que sea posible;
- Cuando sea posible, las fuentes generadoras de niveles muy elevados de radiación no-ionizante deben ser operadas remotamente;
- Limitar el tiempo de exposición de los trabajadores expuestos lo más posible;
- Contar con señalamientos adecuados en las áreas con fuentes peligrosas de radiaciones, y limitar la entrada de personal no capacitado;
- Cuando no se puede reducir el nivel de exposición de otra manera, se pueden utilizar equipos de protección personal contra radiaciones no-ionizantes, especialmente protección para la cabeza, las manos, y los ojos. Este EPP debe garantizar la reducción de la exposición a niveles por debajo de los límites de exposición ocupacional y no debe presentar ningún peligro adicional (como provocar sobrecalentamiento, descargas eléctricas o incendios).
Diagrama EPA
Fuentes
- Andrea Galindo. “¿Qué es la Radiación?” Oficina de Información al Público y Comunicación del OIEA. https://www.iaea.org/es/newscenter/news/que-es-la-radiacion
- “Biological Effects of Infrared Radiation”. National Institute for Occupational Safety and Health, EE.UU. https://www.cdc.gov/niosh/docs/82-109/default.html
- “Electromagnetic Fields”. EC Scientific Committee on Emerging and Newly Identified Health Risks. https://ec.europa.eu/health/scientific_committees/opinions_layman/en/electromagnetic-fields07/index.htm
- “The Electromagnetic Spectrum: Ionizing Radiation”. Center for Disease Control, EE. UU. https://www.cdc.gov/nceh/radiation/ionizing_radiation.html
- “The Electromagnetic Spectrum: Non-Ionizing Radiation”. Center for Disease Control, EE. UU. https://www.cdc.gov/nceh/radiation/nonionizing_radiation.html
- “Heat Stress Guide.” Occupational Health and Safety Administration, EE.UU. https://www.osha.gov/emergency-preparedness/guides/heat-stress
- “Radiation Safety”. Center for Disease Control, EE. UU. https://www.cdc.gov/nceh/radiation/safety.html
- “Radiofrequency and Microwave Radiation in the Workplace”. Radiation Protection Service, Canada. https://uwaterloo.ca/safety-office/sites/ca.safety-office/files/uploads/files/radio-frequency-microwave-radiation-in-workplace.pdf
- “Radiofrequency radiation”. Australian Radiation Protection and Nuclear Safety Agency. https://www.arpansa.gov.au/understanding-radiation/what-is-radiation/non-ionising-radiation/radiofrequency-radiation
- “Radiofrequency (RF) Radiation”. American Cancer Society. https://www.cancer.org/cancer/risk-prevention/radiation-exposure/radiofrequency-radiation.html
- “RF EMFS”. International Commission on Non Ionizing Radiation Protection. https://www.icnirp.org/en/frequencies/radiofrequency/index.html
- “Ultraviolet (UV) Radiation”. American Cancer Society. www.cancer.org/cancer/risk-prevention/sun-and-uv/uv-radiation.html
- “What is Radiation? The Electromagnetic Spectrum”. Center for Disease Control, EE. UU. https://www.cdc.gov/nceh/radiation/spectrum.html